El otro virus
El aislamiento social a causa del covid-19, redujo de manera abrupta el nivel de consumo en todo el mundo. Los cambios de hábitos y la priorización del consumo esencial modificaron la economía de las ciudades.
La magnitud y la rapidez de la paralización de la actividad, junto a la profunda crisis que ya arrastraba la economía argentina, trajo un impacto definitivo para uno de los motores más importantes de la economía nacional: PyMES y comercios se vieron inmersos en una crisis sin retorno.
Oficinas, fábricas y locales vacíos se ofrecen con enormes carteles de venta o alquiler. Esos espacios, deshabitados, supieron formar parte de un ecosistema de ciudad activo y hoy son parte del mobiliario obsoleto y abandonado. Paredes pintadas, persianas bajas y vidrios rotos son el rostro del dolor de miles de empleados.